Viajo, luego existo.

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Fotografía de viajes: guía básica para sacar el máximo partido a tu cámara

Mi bonita Olympus E-M10 y yo en Costa Rica.

Soy un gran apasionado de viajar y de la fotografía (gracias a mi padre), y aunque no soy nada parecido a un profesional ni nunca he profundizado demasiado en la disciplina, creo que puedo recopilar algunos consejos útiles para los que queráis sacar el máximo partido a la fotografía viajera. Este post está enfocado a un perfil principiante e intermedio, para los que encendéis la cámara y disparáis en automático, y el resto de botones os suenan un poco a chino. O a los que queréis profundizar en el tema esta mini guía os puede ser útil.

Antes de nada, me gustaría romper algunos mitos que escucho demasiado a menudo:

  • Los megapíxeles no tienen nada que ver con la calidad de la fotografía, así que al comprar una cámara no es necesario ir a la tienda a buscar la que más megapíxeles tiene pensando que será la mejor. Lo único que indican los megapíxeles es el tamaño máximo de la fotografía, cosa que solo importa si vais a querer imprimir pósters con vuestras fotos, y no creo que ésta opción sea las mas común.

  • Las réflex están sobrevaloradas, antes de que alguien se me eche encima voy a aclarar esto, creo que están sobrevaloradas las cámaras DSLR compradas para disparar en automático y con el objetivo que traen por defecto (llamado pisapapeles en el mundillo porque no tiene mucha calidad), ya que normalmente son de mayor tamaño y pesan más que las compactas y eso no implica que los resultados sean mejores. Con esto vengo a decir que si lo único que queremos es disparar sin preocuparnos de ajustes manuales (o solo de algunos ajustes manuales), entonces es mucho más recomendable una cámara EVIL, una compacta o incluso un smartphone.

  • El tamaño no importa, o al menos no importa el tamaño de la cámara ya que nada tiene que ver con la calidad de la misma, el tamaño que de verdad importa es el del sensor (el chip que capta la luz y genera la fotografía), aunque tampoco es del todo determinante como han demostrado las cámaras micro cuatro tercios (esto se merece un post a parte, pero básicamente con el sensor más pequeño consiguen una calidad muy similar a las réflex).

Una vez aclarado esto, voy a intentar resumir algunos conceptos básicos de fotografía, quizás al leerlos por primera vez te resultarán aburridos y de poca utilidad, pero te aseguro que si los tienes claros conseguirás resultados mucho mejores de los que habías conseguido hasta ahora. Después de los conceptos teóricos te mostraré un listado de efectos prácticos. Y es cierto que puedes conseguir fotografías muy buenas disparando en automático, pero si controlas ciertos ajustes de tu cámara podrás conseguir efectos que hasta ahora estaban fuera de tu alcance.
 

Conceptos básicos de fotografía

Voy a explicarte conceptos teóricos de la manera más sencilla posible, espero que se entiendan bien porque son muy útiles al ponerlos en práctica, fíjate bien en los gráficos porque te ayudarán mucho. Son conceptos básicos que no te explicaré de la manera más precisa posible, sino de la más entendible.
 

Profundidad de campo

La profundidad de campo es la zona nítida o enfocada de la imagen. Por tanto a mayor profundidad de campo, más elementos de nuestra fotografía estarán enfocados. La zona enfocada puede ser más o menos amplia dependiendo de la apertura del diafragma (que se mida mediante el número f/).

Normalmente se utiliza una profundidad de campo grande al fotografiar paisajes (ya que queremos que todo esté enfocado), en cambio se utiliza una profundidad de campo pequeña para resaltar una zona en concreto, como por ejemplo en los retratos (eso significa que algunas zonas saldrán desenfocadas).

Imagen explicativa de la profundidad de campo, derechos de fotoversia.com

 

Apertura del diafragma (número f/)

El diafragma es una parte del objetivo que se puede abrir o cerrar, y regula la entrada de luz en la cámara.

Las diferentes aperturas de diafragma se miden en una escala de valores f (se escriben así: f/2, f/4, f/8...). Cada objetivo tiene unos valores f mínimos y máximos dependiendo de si es más o menos luminoso.

Cuanto más pequeño es el número f más abierto está el diafragma (y por tanto más luz entra a la cámara). cuanto más grande es el número f más cerrado está el diafragma (y por tanto menos luz entra a la cámara).

El número f/ influye directamente en la profundidad de campo, a mayor número f mayor profundidad de campo (más elementos enfocados), a menor número f menor profundidad de campo (menos elementos enfocados).

Al principio esto puede ser un poco lioso, pero el siguiente gráfico te ayudará a entenderlo mejor.

Imagen explicativa de la profundidad de campo y la apertura, derechos de fotoversia.com

Velocidad de obturación

Es el tiempo que la cámara deja pasar luz al sensor (la velocidad de disparo). Normalmente son fracciones de segundo, aunque en ocasiones puntuales pueden ser segundos o incluso minutos.

En la cámara lo verás representado como 1/125 para fracciones de segundo o 2" cuando se refiere a segundos. Como ejemplo, 1/1000 es una velocidad rápida, 1/200 es una velocidad normal, 1/20 es una velocidad lenta y 1" es una velocidad muy lenta.

Por tanto, a más velocidad de obturación menos luz entra en el sensor, y a velocidades más lentas más luz capta la cámara.

En algunas situaciones necesitaremos velocidades más lentas, como cuando queremos capturar imágenes con sensación de movimiento o cuando queremos hacer una fotografía con poca luz. A según qué velocidades es imposible hacer una foto sin que salga movida, para velocidades más lentas que 1/15 necesitarás un trípode.

Al contrario, si queremos congelar el movimiento necesitaremos velocidades de obturación altas.

En fotografía también se utiliza el término tiempo de exposición, hablan de lo mismo desde dos puntos opuestos, es decir, reducir el tiempo de exposición es lo mismo que aumentar la velocidad de obturación, y viceversa.

Imagen explicativa de diferentes tiempos de exposición, derechos de fotoversia.com

Sensibilidad ISO

La ISO controla la sensibilidad del sensor de la cámara, y se puede ajustar dependiendo si necesitamos que el sensor capture más o menos luz.

Las cámaras de hoy en día tienen un rango de ISO desde 100 hasta los 26.000, aunque el rango que realmente usaremos es entre 100 y 6.400 aproximadamente.

Una ISO más baja hace que la cámara capte menos luz, por tanto una ISO de 100 o 200 es perfecta para días soleados, una ISO de 400 para días nublados, y una ISO de 800 para fotografías de interiores o con condiciones de baja luz. Es importante saber que una ISO alta creará ruido en la fotografía (una especie de granos), por tanto es recomendable usar la menor ISO posible.

Imagen explicativa del ruido al utilizar diferentes ISO, derechos de fotoversia.com

Exposición

La teoría dice algo así como que la exposición es la cantidad de luz que recibe el sensor para que se forme una imagen. En la práctica la exposición es una combinación de la ISO (cantidad de luz que el sensor absorbe), de la apertura del diafragma (cantidad de luz que dejamos pasar por el objetivo) y de la velocidad de obturación (cantidad de tiempo que dejamos que la luz llegue al sensor).

Estas 3 variables son dependientes entre sí, de manera que si modificamos una de ellas, el resto se verán afectadas, la mejor manera de entender esto es mediante el triángulo de exposición (tómate tu tiempo para interiorizar los conceptos y entender bien cómo se relacionan entre ellos).

Triángulo de exposición, derechos de fotoversia.com

Por tanto si la cámara capta la luz de manera fiel se dice que la fotografía está expuesta correctamente, en caso de haber captado menos luz la foto está subexpuesta, y en caso de haber captado demasiada luz la foto está sobreexpuesta.

 

Formato de imagen

Básicamente podemos disparar en formato RAW o JPG (o JPEG). RAW no es un tipo de imagen en si (se necesita un software para poder ver el contenido), sino un formato sin compresión que almacena toda la información que ha captado el sensor de la cámara (un RAW ocupa de 3 a 5 veces más que un JPG).

A efectos prácticos esto significa que RAW ocupa mucho más espacio pero contiene mucha más información, y por tanto tenemos mayor control sobre la fotografía, pudiendo corregir la exposición, el balance de blancos o los ajustes de saturación y enfoque.

Las desventajas de disparar en RAW son que necesitas un software para revelar (revelar en el mundo digital es exportar la imagen a un formato estándar, como JPG, y con unos ajustes predefinidos), y que ocupan mucho más espacio que un JPG.

Para fotografías de viajes (sobretodo de viajes de larga duración), recomiendo disparar en JPG casi siempre como norma general, pero ir disparando en RAW de vez en cuando con fotografías más artísticas, ya que podremos sacar mucho más partido en los retoques.

 

Encuadre

El encuadre es la porción de la escena que va a captar la cámara, y es una de las decisiones más importantes al hacer una fotografía (y que la cámara no puede hacer por nosotros). El encuadre puede ser horizontal (el más habitual en fotografía), vertical o inclinado (menos utilizado que los anteriores pero útil para enfatizar el movimiento).

Hay algunas reglas básicas que necesitas conocer, todas estas reglas son orientativas y no debes tomártelas como estrictas:

  • Regla de los tercios. Se trata de dividir el encuadre (lo que ves en la pantalla o en el visor) con 2 líneas verticales y 2 horizontales, dividiendo la imagen en tercios, y situar los elementos de nuestra fotografía en las intersecciones de estas líneas en vez de situarlos en el centro. En muchas cámaras puedes activar esta cuadrícula en la pantalla o en el visor.

  • Seguir el movimiento. Sirve para transmitir movimiento en la fotografía y se trata de dejar espacio en la zona hacia donde se va a desplazar el sujeto que fotografiamos. Es decir, imaginemos que fotografiamos a una persona de perfil que está andando, aplicando esta regla deberíamos dejar espacio delante de la persona. También se aplica en los retratos, cuando fotografío a alguien mirando hacia la izquierda intento situar a la persona en la derecha. El sujeto que estamos fotografiando se llama espacio positivo y el resto se llama espacio negativo.

  • Céntrate en los detalles. En muchas ocasiones intentamos fotografiar muchas cosas a la vez, cuando es mucho más efectivo intentar centrarse en los detalles y fotografiar un solo punto de interés para captar mejor la atención.

  • Líneas y horizonte. En fotografías de paisajes es importante decidir dónde situamos el horizonte, ya que nuestra toma transmitirá cosas distintas. Las líneas en general son importantes, ya sean naturales como horizontes o montañas, o artificiales como escaleras o vías del tren, ya que ayudan a ordenar la escena y guiar al "espectador" hacia el elemento que queremos destacar.

  • Patrones y simetrías. En ocasiones encontramos patrones, ya sean naturales o artificiales, y captarlos con la cámara con un encuadre correcto (normalmente simétrico) siempre dan buenos resultados.

Toda esta teoría es solo una base de conocimientos mínimos, luego puedes seguir profundizando en otros conceptos de fotografía como el histograma, sensor, balance de blancos, distancia hiperfocal, retoque fotográfico... en este caso yo prefiero centrarme en una combinación de teoría básica y práctica para que el post sea más ameno y no se haga eterno.
 

Modos de disparo

Antes de explicarte algunos efectos que puedes conseguir con la teoría que acabamos de ver, veamos los diferentes modos de disparo:

  • Modo Automático (Auto en el dial de la cámara): la cámara decide todos los parámetros de disparo; la apertura, la velocidad, la ISO, etc. Después de este post espero que no lo utilices siempre, idealmente solo deberías usar automático cuando necesitas hacer una fotografía rápida y no tienes tiempo de ajustar la cámara.

  • Modo Programable (P en el dial): permite controlar el flash, ajustar la ISO, el balance de blancos y poco más. Normalmente cuando quieres disparar en automático en realidad deberías utilizar este modo, básicamente cuando queremos rapidez o centrarnos en la composición (o que en tus vacaciones estás ya cansado de hacer fotos y solo quieres "captar momentos" sin pensar demasiado).

  • Modo de prioridad a la Apertura (A o Av en el dial): tú decides la apertura (el número f/) y en base a ese valor la cámara decide la velocidad de obturación para que la fotografía quede correctamente expuesta. Por tanto, en este modo controlamos la profundidad de campo. Este modo lo usaremos para hacer el efecto Bokeh (con una f/ baja para difuminar el fondo) o en la fotografía de paisajes (con una f/ alta para enfocar toda la toma).

  • Modo de prioridad a la Velocidad (S o Tv en el dial): tú controlas la velocidad de obturación y la cámara controla la apertura para conseguir una foto con la exposición correcta. Lo utilizaremos para mostrar movimiento en una foto (con una velocidad baja) o en fotografía de deportes (con una velocidad alta para congelar el movimiento).

  • Modo Manual (M en el dial): controlas todos los ajustes de la cámara, tanto la velocidad, como la apertura y la ISO. Es algo más fácil de lo que parece porque la cámara nos mostrará siempre la exposición, y por tanto podemos ir corrigiendo la velocidad y la apertura antes de disparar hasta que consigamos una correcta exposición. Este modo lo usaremos por ejemplo al fotografiar estrellas.

Efectos que se pueden conseguir cuando controlas la velocidad y la apertura

Después de la breve explicación sobre los modos de disparo veamos algunos ejemplos prácticos, casi todos se pueden conseguir en modo semi-automático (usando el modo prioridad de apertura o el modo prioridad de velocidad).

Bokeh

Todos nos hemos preguntado alguna vez cómo se hacía el efecto típico del fondo difuminado, normalmente con un retrato. En realidad es bastante sencillo, necesitamos un objetivo luminoso si es posible, seleccionar una f pequeña (f/3.5 o menor), y situar a la persona que queremos fotografiar a poca distancia de la cámara, y a la vez que la persona esté a bastante distancia del fondo. Si es tarde/noche y en el fondo hay luces de farolas la fotografía te quedará muy espectacular.

Para conseguir un bokeh puedes utilizar el modo prioridad de apertura o el modo manual.

Tam en Cienfuegos, Cuba. Ejemplo del efecto Bokeh: f/1,8 - 1/40s - ISO 1600 - 45mm

Efecto seda para el agua

Este efecto consiste en que el agua en movimiento se vea con un efecto sedoso, lo habrás visto en muchas fotografías de cascadas, ríos o incluso del mar. Este efecto se consigue con velocidades de obturación lentas (como muy lentas hasta 1/15 segundos, más lentas que ese valor necesitarás trípode o apoyarla en algún sitio para que la fotografía no salga movida). Te recomiendo que no abuses de este efecto, se pueden hacer fotografías muy bonitas a cascadas o ríos sin el efecto seda.

Para conseguir el efecto seda puedes utilizar el modo prioridad de velocidad o el modo manual.

Cascada Tiu Kelep en Lombok, Indonesia. Ejemplo de efecto seda: f/20 - 1/10s - ISO 200 - 42mm

Captar movimiento

Con este efecto queremos transmitir sensación movimiento. Este efecto está relacionado con el anterior, ya que ambos utilizan velocidades de obturación lentas para captar el movimiento, aunque en este caso puede ser más complicado ya que en ocasiones tienes que mover algo la cámara para conseguir el efecto (se conoce como barrido o panning), por ejemplo cuando quieres captar una moto enfocada con el fondo en movimiento. En cambio si queremos hacer una foto nocturna captando el recorrido de las luces de los coches podremos conseguirlo con la cámara quieta.

Trayecto de tren en la India. Ejemplo de cómo captar el movimiento: f/4,5 - 1/6s - ISO 800 - 23mm

Todas las fotografías que se consiguen con una velocidad de obturación lenta se conocen como fotografía de larga exposición, y engloba muchos tipos diferentes de fotografías, algunas tan creativas como el el Lightpainting ("pintar" con luz).

Este es un ejemplo básico, pero en realidad se pueden conseguir auténticas maravillas con la fotografía de larga exposición.

 

Fotografía de estrellas

Necesitarás un trípode o apoyar la cámara en una superficie fija y utilizar un control remoto si es posible (hoy en día muchas cámaras tienen wifi y se puede usar el móvil para controlarlas en remoto), necesitarás también utilizar el enfoque manual y ajustarlo al infinito, seleccionar una f relativamente baja (f/3,5), unos 20-30 segundos de velocidad de obturación y una ISO alta (4.000 por ejemplo). Dependiendo de las condiciones necesitarás ajustar estos valores, así que tendrás que hacer varios disparos de prueba. Fotografiar estrellas es una buena oportunidad para disparar en RAW.

Para conseguir fotografiar estrellas necesitas utilizar el modo manual para poder controlar tanto la apertura como la velocidad. En alguna ocasión como por ejemplo en noches con pocas estrellas (y por tanto con menos luz) te puede interesar mantener el obturador abierto de manera "manual" (en vez de especificar un tiempo), esto se consigue utilizando el modo BULB al seleccionar la velocidad de obturación.

Acampada en el volcán El Hoyo, Nicaragua. Ejemplo de fotografía de estrellas: f/3,5 - 60" - ISO 1600 - 14mm

HDR (High Dynamic Range)

Esta técnica consiste en unir varias imágenes con diferentes exposiciones para mostrar tanto las partes más oscuras como las más claras de las fotos, las cámaras actuales ya tienen esta opción incorporada (en este caso lo único que debes hacer es intentar mantener la cámara lo más quieta posible), se pueden elegir algunos parámetros aunque el más común es generar la combinación de 3 fotos, una con la exposición correcta y dos variando un paso (+1 y -1). A mi en particular no me gusta abusar del HDR, solo en momentos muy puntuales (cuando hay mucho contraste entre los claros y los oscuros), ya que es fácil que una foto con HDR se vea demasiado artificial.

En el siguiente ejemplo puedes ver 2 fotos del mismo lugar, una con HDR y otra sin.

Time Lapse

Se trata de una técnica muy llamativa para hacer vídeos a partir de fotos, básicamente necesitamos que la cámara haga fotos continuamente cada cierto tiempo (normalmente cada pocos segundos), y luego juntar esas fotos en la misma cámara o con un software en el ordenador. En realidad esta técnica nada tiene que ver con el resto de las que te he explicado, pero viajando es un buen momento para entretenerte y probar a hacer un time lapse, sin duda algunos time lapses son obras de arte.

 

Mis consejos para hacer fotos de viajes

No quería acabar esta guía sin hacerte algunas recomendaciones que a mi parecer son muy importantes:

  • La primera y la más importante, no dejes que la cámara eclipse las experiencias del viaje. Es demasiado común ver a viajeros haciendo fotos sin parar y sin disfrutar del momento (me incluyo, en algún momento me ha pasado).

  • Relacionado con el punto anterior, intenta hacer las mínimas fotos posibles. Poco a poco aprenderás a ser más eficiente, combinar mejor el viaje y la fotografía, y además te ahorrarás el tener que borrar cientos de fotos repetidas.

  • Se respetuoso, en algunas culturas está muy mal visto fotografiar a niños. Si fotografías alguna celebración, deja espacio suficiente para no invadir el espacio vital. En la medida de lo posible, intenta primero hablar con una persona local, y después pide permiso para fotografiarla, ya que esa foto tendrá una historia detrás y será mucho más valiosa para ti.

  • La mejor fotografía no es la que tiene el mejor encuadre o la mejor técnica, sino la que consigue transmitir emociones de alguna manera.

  • Intenta llevar como máximo 2 objetivos, es incómodo llevarlo, más aún tenerlo que cambiar. Yo normalmente llevo un objetivo gran angular para todo y otro muy luminoso para retratos, y solo saco el de retratos alguna tarde con la hora azul o alguna noche para hacer fotografías con poca luz.

  • Relacionado con el punto anterior, viaja ligero; elige una cámara pequeña y manejable, una funda, baterías extras y ya, como mucho añade un objetivo extra, pero no te recomiendo llevar demasiados accesorios, es muy incómodo moverse cargado con peso.

Espero que esta guía te haya sido útil como introducción a algunos temas básicos de fotografía. Próximamente me gustaría escribir sobre el retoque fotográfico enfocado a viajeros (no a profesionales), que al final y al cabo es importante para convertir una buena fotografía en una fotaza, y no me refiero a añadir filtros, sino a mejorar la fotografía tocando las curvas de nivel, el balance de blancos, el brillo, la exposición... y un sinfín de ajustes que se realizan con un software fuera de la cámara.

¡Ahora solo te queda coger la cámara y salir a practicar! Y si todavía no tienes una, la Olympus E-M10 es una fantástica elección como cámara de viajes, con ella hice unas cuantas fotos durante el año que estuve viajando ;)