Nueva Zelanda
Nelson y Abel Tasman, de una ciudad con encanto a paisajes de postal
Nelson Llegamos a este pueblito sin quererlo. Pero teníamos una obligación, y era arreglar la furgo. Medio mosqueados medio curiosos por cambiar un poco el rumbo lo primero que hicimos fue llamar a varios talleres mecánicos, y al ser sábado sólo encontramos uno abierto. Diagnóstico: No hay nada que hacer.